Para subir de piso y ganar en autonomía, una persona que tiene problemas de movilidad debe utilizar un salvaescaleras. Pero en realidad, ¿de que se trata, y cómo funciona? Es igualmente posible que algunas personas se pregunten sobre los salvaescaleras precios.
El salvaescaleras es una silla elevadora compuesta por un sillón especialmente concebido para ese efecto, de un mecanismo de entrenamiento específico, y de un raíl bastante elegante. El salvaescaleras se puede instalar en escaleras rectas, en escaleras con giros, y en escaleras con varios pisos.
No se debe temer la transformación estructural o arquitectónica de la escalera ni de la casa. El salvaescaleras se suele instalar sobre las escaleras que ya existen.
¿Qué es un salvaescaleras?
Este mecanismo está concebido para ayudar a las personas con movilidad reducida a subir las escaleras y acceder con total seguridad a otro piso de la casa. Instalada por profesionales cualificados, el salvaescaleras se adapta bien a cualquier modelo de escalones, independientemente del tamaño y de la configuración.
El salvaescaleras es por tanto un asiento que se desliza a lo largo de un raíl. Se trata pues de un aparato eléctrico que hay que enchufar y que funciona con tensión baja. Por esta razón mucha gente llama a esta herramienta de desplazamiento “sillón elevador eléctrico”. Igualmente va equipado con baterías, por tanto se puede utilizar en caso de corte de la corriente. No se corre ningún riesgo de verse bloqueado en la escalera. La autonomía de la mayoría de estos salvaescaleras permite al menos 10 usos, o incluso más, en caso de corte eléctrico.
¿Por qué instalar un salvaescaleras?
La instalación de un salvaescaleras en la casa está motivado por la necesidad de hacer más cómodo y seguro el acceso a otro piso por parte de personas con problemas de movilidad. Efectivamente, es una solución que presenta muchas ventajas. Mientras que muchas personas, por falta de información, hacen obras en la casa para poder desplazarse por las diferentes habitaciones, el problema de acceso no se plantea con un salvaescaleras.
¿A quién va dirigido?
Existen tres categorías de usuarios que utilizan los salvaescaleras. Primeramente están las personas que no son inválidas ni dependientes, pero que presentan ciertas dificultades para subir los escalones a diario. Luego están las personas que se encuentran en situaciones de dependencia por culpa de un accidente o de una enfermedad. Estas son las personas con movilidad reducida. Finalmente, están los ayudantes de las familias que también pueden aprovecharse de un salvaescaleras para hacer más leve su labor cotidiana.