En 1914 comienza el cambio en el que hoy en día registramos la realidad. Y es que, gracias al ingeniero Oskar Barnack, trabajador de microscopios Leitz, se construye el primer modelo de cámara compacta con película de 35 mm. Diez años después, nacía la primera cámara compacta Leica (Leitz + Cámara = Leica).
Pequeña, ligera y fácil de manejar. Esto supuso que no sólo los aficionados a la fotografía las usasen, sino que en el ámbito profesional fue todo un boom. Fue toda una revolución para los amantes de este arte. Con ella se pudo mostrar de manera fácil y dinámica el mundo, ya que se podía llevar fácilmente en el bolsillo.
En aquella época los fotógrafos de prensa aprovecharon esta oportunidad y apostaron por Leica para mostrar sucesos importantes. Robert Capa o Henri Cartier-Bresson fueron algunos de los que descubrieron las sorprendentes cualidades que ofrece esta cámara en el ámbito periodístico. De este modo se plasmaron en imágenes la Guerra Civil Española, la II Guerra Mundial, la Guerra de Vietnam, etc.
Actualmente, las cámaras Leica siguen siendo un valor indescriptible y, siguen avanzando y sacando al mercado nuevos modelos con un diseño clásico, pero con flamantes características. Además de cámaras compactas, en el mercado existen otros tipos de cámaras, como las instantáneas, al estilo Polaroid.
Las lentes Leica son un hallazgo en este aspecto, puesto que cada una pasa por rigurosos procesos de garantía de calidad bajo los mejores expertos. Fabricadas en Alemania, se han convertido en sinónimo de calidad llegando hasta la instalación de estas lentes en los móviles de la marca Huawei, recién lanzados al mercado, haciendo que la cámara de estos móviles sea de alta calidad, con infinitas posibilidades a la hora de sacar fotos.No hay mucha variedad en cuanto modelos se refiere, pero sí son cámaras resistentes, con un alto rendimiento de sus objetivos y con un diseño extraordinario que te hará destacar tanto como fotógrafo como en la calidad de las fotografías.