Ha pasado el tiempo desde que adquiriste tu vivienda, aún recuerdas cómo poco a poco cada espacio se llenó de color, de muebles nuevos, de esas macetas que tu madre o alguna amiga te regaló, pues como sabes, al inicio de una nueva etapa y sobre todo, si te has casado o simplemente te independizaste, todo es orden y cuidas hasta el mínimo detalle.
Pero, pasados los años, comienzas a darte cuenta de que el baño necesita ya una remodelación, o bien un nuevo bebé viene en camino y necesitas ampliar sí o sí tu vivienda. Tal vez en ese momento no cuentes con todo el dinero para hacer tal inversión, pero informarte para conseguir un crédito hipotecario puede hacer la diferencia entre renovar con gusto y certeza, a desistir en cambiar el aspecto de tu hogar.
Tips que te ayudarán a planear una remodelación exitosa:
- Ten muy claro tu objetivo. Si vas a cambiar las puertas o requieres de otra recámara, o tal vez tirar algún espacio, debes tener definido lo que vas a hacer, ya que podrías gastar más de lo que tenías contemplado.
- Consulta a un experto. Es posible que ya te hayas imaginado qué es lo que vas a realizar en tu hogar, pero nunca está de más consultar a un arquitecto o profesional de la construcción para que todo salga bien y no “al aventón”.
- Infórmate y escoge el crédito hipotecario adecuado a tus expectativas y necesidades: si vas a hacer cambios menores o una remodelación total, pues dependiendo de ello podrás pagar en periodos de cinco, diez, 15 o 20 años, según tu elección y capacidad adquisitiva.
- También puedes optar por un crédito hipotecario si además de mejorar una vivienda la quieres comprar.
- Y también existe la opción de que si antes ya tenías un crédito de este tipo, puedas renovarlo en otra institución.
Como puedes ver, la renovación de tu hogar necesita, además del gusto porque tu espacio sea más confortable, de la mejor planeación para habitarlo muchos años más.