Las pantallas led prácticamente ya forman parte de nuestro entorno urbano. Los grandes paneles publicitarios en las calles principales de las ciudades más desarrolladas son parte del mobiliario, y no nos resulta extraño. De hecho, alguna vez nos paramos a mirar qué imágenes o vídeos aparecen, ya que sus grandes dimensiones nos impactan visualmente. ¿Pero quién está detrás de la producción de estos audiovisuales? ¿Cómo consiguen crear imágenes tan grandes como un edificio?

Las pantallas LED para exterior requieren de unas consideraciones gráficas y tecnicismos importantes que deben tenerse en cuenta a la hora de publicar videos bajo este medio.

Resolución, distancia y ubicación

Puede llegar a sorprenderte, pero las pantallas gigantes de led no necesitan una gran resolución, sino lo contrario. Generalmente, percibimos este tipo de formatos a largas distancias (entre 8 y 30 metros) por lo que nunca miraremos al detalle la calidad.

Nada de resoluciones HD que, de hecho, nos quitarían muchas horas de tiempo para renderizar el proyecto. Simplemente, nos interesa que se vea correctamente a una distancia estándar y se entienda el mensaje.

Ligado a la resolución, como decimos, está la distancia. Tendremos que analizar cuál es la más óptima para el evento o acto concreto en el que estemos utilizando este medio audiovisual. En el caso de vías públicas con tráfico, este punto es muy importante ya que nos interesa que llegue a los conductores de forma directa, pero sin que resulte molesto a nivel visual.

En tercer lugar, la ubicación de la pantalla será un aspecto que determine la distancia y, por ende, la resolución de los gráficos. Una pantalla en una ubicación elevada implicará más distancia y por lo tanto menos resolución necesaria, y viceversa.

Diseño y animación sencillos

Sabemos que queremos impactar lo más rápido y mejor posible, pero ¿tengo, entonces, que crear un diseño complejo y una composición extrema para captar a nuestro espectador? En absoluto. De hecho, se aconseja que el diseño sea sencillo, directo y que sus tipografías tengan una gran legibilidad.

Disponemos de poco tiempo para que el posible cliente capte el mensaje, por lo que no podemos añadirle elementos gráficos que despisten al concepto que realmente queremos transmitir.

En relación al diseño, los colores, si son primarios o secundarios, mucho mejor. También, el uso de degradados y variaciones de color no suelen ayudar en este tipo de medios.

Por otro lado, las animaciones también deben expresar movimientos sencillos y fáciles de captar en cuestión de segundos.

Podríamos decir que la norma del “menos es más” es imprescindible en todos los aspectos que tengan que ver con el universo gráfico de un proyecto que será emitido en un lugar público y de cara al exterior.

Imagen: unsplash.com

El tiempo óptimo

Según el análisis de varios estudios de medios en publicidad exterior, se recomienda no exceder los 15 segundos, básicamente porque es el tiempo máximo que tiene un transeúnte o un conductor para prestar atención a tu vídeo.

Antes de publicar tu vídeo, ten en cuenta todos estos aspectos, y conseguirás que tu proyecto audiovisual tenga éxito. Aunque no hay nada mejor que ponerse en la piel de un ciudadano que pasea por la ciudad y preguntarte si tú también prestarías tu tiempo en ver un vídeo como el que has producido o, de lo contrario, pasarías de largo.